Quiero saber cómo te sienta el pintalabios de mi boca,
la textura de tu lengua, a qué sabe lo que me pierdo.
Quiero avergonzarme tras salvaje lucha y
verte infinita y frágil, seducida.
Déjame amarte aunque sea a escondidas.
Déjame arrancarte un suspiro,
robarte el tiempo,
robarte el cuerpo.
la textura de tu lengua, a qué sabe lo que me pierdo.
Quiero avergonzarme tras salvaje lucha y
verte infinita y frágil, seducida.
Déjame amarte aunque sea a escondidas.
Déjame arrancarte un suspiro,
robarte el tiempo,
robarte el cuerpo.
Déjame, déjate, dejémonos.
Dejad que os bese, La niña Lola.
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La belleza sólo se justifica por si misma. Como la virtud. La belleza del deseo es virtud
ResponderEliminarNietzsche
Nadie podría decir algo tan hermoso, a las cinco de la mañana, o casi, salvo "Nietzsche".
ResponderEliminarLa niña Lola, despierta, pero en la Luna.